Galletas de espelta integral

El otro día me puse a hacer galletas con nuestro hijo. Me pidió insistentemente que hiciéramos galletas y como tenía bastante harina de espelta integral en casa me puse a crear mi propia receta de galletas de espelta 100% integral. El resultado inmejorable. No tenía ni idea de cómo iban a quedar al sacarlas del horno, pero os aseguro que están increíbles. La textura del interior es crujiente y la canela le da un sabor muy rico. 

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 Ingredientes:

• 250 g. de harina de espelta integral
• 50 g. de azúcar
• 1/2 cucharilla de levadura química
• 10 g. de coco rallado
• 1 pizca de canela en polvo
• 1 yema cocida
• 150 g. de mantequilla ecológica

Preparación:

1. Echa en un recipiente la espelta, el azúcar, la levadura química, el coco y la canela en polvo y mezcla bien.
2. Añade la yema cocida pasándola por un colador y por último añade la mantequilla en dados a temperatura ambiente.
3. Mezcla con las manos hasta obtener una especie de arena y después amasa hasta obtener una bola. 
4. Coloca la bola en un recipiente de vidrio con tapa y déjala en el frigorífico media hora.
5. Coloca la masa sobre papel de hornear y con ayuda de un rodillo aplasta la masa hasta dejarla de unos 5 mm de grosor. Para dejarla del mismo grosor yo uso un rodillo que lleva unos aros laterales intercambiables y que te permiten decidir el grosor que quieres. Estoy encantada con él. Puedes verlo aquí. 
6. Para darles forma puedes usar un aro o unos cortapastas para que queden como en la imagen. Podéis comprar el que yo he usado aquí. Vienen cuatro caritas diferentes y tras cortarlas con el cortador que hay incluido, las galletas miden unos 6,5 cm. Son de silicona de gran calidad y son muy fáciles de lavar. 
7. Una vez cortadas todas las galletas, colócalas sobre papel de hornear en una bandeja de horno y mételas en el frigorífico media hora más.
8. Hornéalas en horno precalentado a 180 ºC con ventilación durante 15 minutos aproximadamente. Pasado este tiempo déjalas enfriar para que se endurezcan.

Rigatoni integrales con tomates cherry y anchoas

Hace tiempo que no publicaba una receta de pasta. La de hoy es sencillísima, lleva muy pocos ingredientes y está increíblemente rica, rigatoni con tomates cherry y anchoas. Eso si, que el nombre no os confuna porque el sabor de las anchoas no se nota en absoluto en esta receta. Puedes usar rigatoni o mezze rigatoni, lo que encuentres en tu supermercado habitual, y aunque la receta original usa pasta blanca yo he preferido usar integral. Tarda más en cocerse y es ligeramente más dura, pero mucho más interesante desde el punto de vista nutricional. Lo dejo a vuestra elección. Por cierto, la receta la saqué del canal de Youtube Milk Street. Merece la pena que os paséis por este canal porque tiene recetas muy interesantes.

Ingredientes:

• 1 kg. de tomates cherry
• aceite de oliva virgen extra 
• pimienta negra molida
• 2 dientes de ajo
• 1 cebolla blanca
• 5 filetes de anchoa en aceite de oliva virgen extra
• 1 pellizco de hojuelas de cayena
• 500 g. de rigatoni o mezze rigatoni (yo uso integrales)
• 1800 ml de agua
• sal
• parmesano rallado

Preparación:

1. En una o dos bandejas aptas para horno mezcla los tomates cherry enteros, 4 cucharadas de aceite, ½ cucharadita de sal y pimienta molida al gusto. Hornea a 200 ºC con la bandeja en la parte alta del horno hasta que los tomates estén blandos y la mayoría se hayan abierto. Reserva.
2. En una sartén amplia echa 4 cucharadas de aceite y el ajo entero, pelado y machacado. Cocina a fuego medio, revolviendo, hasta que el ajo esté ligeramente dorado. Retira el ajo, echa la cebolla finamente picada y ½ cucharadita de sal. Tapa y cocina, revolviendo ocasionalmente, hasta que la cebolla esté completamente blanda pero no dorada. 
3. Agrega las anchoas y las hojuelas de cayena y cocina durante 5 minutos, revolviendo hasta que las anchoas se hayan deshecho.
4. Añade los tomates con todo el jugo que haya soltado en el horno. Cocina a fuego lento, revolviendo con frecuencia y presionando los tomates hasta que quede una salsa cremosa. El tiempo dependerá de la cantidad de salsa que hayan soltado los tomates cherry que hayas usado. Reserva.
5. En una olla grande pon a hervir 1800 ml de agua. No uses más cantidad de agua para hervir la pasta ya que lo que te interesa es conseguir un líquido almidonado que usarásmás tarde.
6. Agrega la pasta y 1 cucharadita de sal y cocina, revolviendo de vez en cuando, hasta que la pasta esté al dente, es decir, que esté tierna por fuera pero aún bastante firme por dentro.
7. Escurre la pasta y reservar 2 tazas del agua de cocción. Vuelve a echar la pasta en la olla vacía y echa después la mezcla de tomate y si fuera necesario un poco del agua de cocción reservada. Cubre y cocina a fuego medio, revolviendo de vez en cuando hasta que la pasta esté cocida, agregando más agua reservada según sea necesario para que la salsa se adhiera bien a la pasta. La salsa debe reducirse bastante y quedar cremosa. 
8. Sirve con un poco de queso parmesano rallado y un poco de aceite de oliva virgen extra.

Galletas digestive (sin gluten)

El otro día preparé estas deliciosas galletas tipo Digestive sin gluten que vi en el canal de Youtube Postressingluten. Las galletas sin gluten son ideales para aquellas personas que tienen no pueden consumir gluten. Son muy fáciles de hacer y están increíblemente ricas. ¡No echaréis de menos las originales!

Ingredientes:

• 65 g. de harina de sorgo
• 170 g. de harina de avena sin gluten
• 1 cucharadita de levadura química
• 1/4 cucharadita de sal
• 120 g. de mantequilla sin sal
• 70 g. de azúcar de caña o azúcar de coco
• 50 ml de leche entera sin lactosa ( puede ser de almendras)
• chocolate 85% cacao

Preparación:

1. Pon en un bol la mezcla de harinas junto con la levadura y la sal. Mezcla bien.
2. Añade la mantequilla en punto pomada cortada a dados pequeños. Amasa 4 minutos con las varillas de la batidora.
3. Añade el azúcar y mezcla de nuevo.
4. Vierte la leche poco a poco y termina de amasar.
5. Echa la masa sobre papel de hornear, cubre con otro papel de hornear y aplasta con la ayuda de un rodillo.
6. Deja 30 minutos a el frigorífico para que la masa se endureaca.
7. Saca del frigo y corta las galletas con un cortador de 5 o 6 cm de diámetro.
8. Hornea en horno precalentado a 180 ºC durante 10-12 minutos.
9. Deja enfriar sobre una rejilla y si quieres puedes bañar las galletas en chocolate.
10. Para ello, derrite el chocolate al baño maría y pasa las galletas por el. Coloca sobre una bandeja y con un palillo haz las líneas que ves en la imagen.

Pasta fresca de arroz (sin gluten)

No sé qué tiene hacer pasta casera, pero me encanta. La de hoy es sencillísima. Tenía ganas de preparar una pasta fresca sin gluten y que mejor que una pasta fresca de arroz integral. La podéis preparar a mano o a máquina (si queréis ver la que uso yo, haced clic aquí). Es una máquina italiana de buena calidad que uso desde hace años y que está como el primer día. La verdad es que estoy encantada con ella. 

La receta es del blog Cannelle et vanille, un blog que sigo desde hace años y que me gusta muchísimo. 

Como podréis imaginar, preparar esta pasta no tiene ninguna complicación y el resultado es inmejorable. Por cierto, si os gusta hacer pasta casera sin gluten, podéis echar un vistazo a la receta de la pasta casera de harina de garbanzo. Está también riquísima.

Ingredientes:

• 140 g. de harina de arroz integral 
• 60 g. de fécula de patata
• 2 cucharillas de goma xantana 
• 1 cucharilla de sal marina
• 4 yemas
• 2 huevos

Preparación:

1. En un bol mezcla la harina de arroz integral, la fécula de patata, la goma xantana y la sal.
2. Haz un hueco en el centro y echa los huevos y las yemas. Bate suavemente con un tenedor y poco a poco ve añadiendo la harina. Amasa durante 10 minutos aproximadamente con las manos hasta hasta obtener una masa suave y homogénea.
3. Haz una bola y corta la masa en cuatro cuartos.
4. Esta masa la puedes extender con un rodillo y cortar a mano o puedes hacerlo con la máquina. 
5. Si optas por usar la maquina, coge uno de los trozos y aplánalo entre las manos con un poco de fécula de patata para que no se pegue. Deja el resto de la masa cubierta con un paño húmedo para que no se seque.
6. Pasa la masa por la máquina en la posición más ancha. Repite 3 veces. 
7. Reduce un poco la anchura y pasa de nuevo la masa. Repite hasta obtener el grosor deseado.
8. Haz lo mismo con los trozos restantes de masa.
9. Coloca el accesorio para hacer tallarines y corta las tiras de masa. Si ves que la masa se pega, puedes echar un poco de harina de arroz por ambos lados antes de cortarla.
10. A mi me gusta secar la pasta colgada en un tendedor plegable dentro de casa. Coloco los tallarines bien separados para que al secarse no se apelmacen. Al día siguiente están listos para cocinarlos con la salsa que más te guste.

Pasta fresca de harina de garbanzo

Me gusta hacer de vez en cuando pasta fresca en casa y me encanta probar harinas nuevas para su elaboración. Hoy os traigo la receta de la pasta fresca con harina de garbanzo, una pasta fresca sin gluten perfecta para sustituir a la pasta con gluten o simplemente otra forma de comer legumbres. No hace falta ser celíaco para comer este tipo de recetas. Está tan rica que la puede comer cualquier persona. La idea la vi en los blogs Nonna paperina y Mi dieta cojea.

Normalmente hago pasta fresca con la máquina de hacer pasta Imperia, pero para este tipo de harina prefiero aplanarla primero a mano con ayuda de un rodillo y después o bien la enrollo sobre sí misma y la corto con un cuchillo o bien la corto con la máquina. Las cantidades que os pongo a continuación son para 4 personas. Puedes prepararla después con los ingredientes que más te guste, pero a mi personalmente este tipo de pasta me gusta comerla con un sofrito de cebolla y tomatitos cherry. Al final le añado pimienta negra recién molida y queso Idiazabal rallado. ¡Está increíble! Seguid leyendo y veréis que hacer pasta fresca sin gluten es realmente fácil.

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Ingredientes:

• 400 g. de harina de garbanzos tamizada
• 3 huevos grandes a temperatura ambiente
• 1 cucharilla de aceite de oliva extra virgen
• un pellizco de sal

Preparación:

1. Echa la harina de garbanzo en un bol amplio y en el centro echa el resto de los ingredientes.
2. Bate con un tenedor los huevos y poco a poco ve mezclándolos con la harina. Después, amasa a mano hasta integrar bien todos los ingredientes y continua amasando durante 10 minutos aproximadamente. Si fuera necesario puedes añadir un poco de agua.
3. Pasado este tiempo, haz una bola, cúbrela con papel film y déjala en el frigorífico toda la noche.
4. Al día siguiente, corta la masa en 4 porciones y coloca cada porción sobre una superficie enharinada.
5. Esta masa la puedes extender y cortar a mano o puedes hacerlo con la máquina.
6. Si vas a cortarla a mano, haz un rectángulo fino con cada porción de masa, enharínalo y enróllalo sobre sí mismo. Después, corta con un cuchillo pequeñas rodajas de la anchura de un tallarín. Una vez cortados, desenrolla y pon a secar la pasta hasta el día siguiente.
7. Si, en cambio, vas a usar la máquina, coloca una porción sobre una superficie enharinada. Extiéndela con el rodillo hasta dejarla lo más fina posible y de la anchura de la máquina. Enharínala por ambos lados para que no se pegue y pásala por la máquina con la apertura más ancha y ve repitiendo esto cerrando cada vez un poco más la apertura. Yo lo hago hasta llegar a la penúltima posición. Después, corta cada lámina con el accesorio para hacer tallarines.
8. Para secar la pasta puedes usar en tendedor plegable o poner dos silla una enfrente de la otra y colocar una sábana de algodón sobre ellas. Coloca los tallarines bien separados para que al secarse no se apelmacen.

Pasta fresca de espelta integral

Cada vez me gusta más preparar recetas con ingredientes integrales y por eso he decidido explicaros cómo preparo en casa la pasta fresca de espelta integral. En este caso tagliatelle de espelta integral.

Por supuesto, puedes adaptar la receta y preparar tu propia pasta con trigo común. Las cantidades son las mismas, pero no será necesario que eches agua. Si no has hecho nunca pasta fresca, igual es mejor que comiences haciéndola con harina común porque la masa resultante es más fácil de trabajar, pero una vez que hayas aprendido a hacerla, puedes prepararla con harina integral sin ningún problema. Yo uso desde hace años la máquina para hacer pasta Imperia, estoy encantada con ella.

Ingredientes (para 1 persona):

• 100 g. de harina de espelta integral
• 1 huevo grande
• 1 cucharada de agua
• 1 pellizco de sal

Preparación:

1. Bate el huevo y el azúcar en un bol amplio. Añade la sal y la mitad de la harina y amasa con una espátula de madera. 
2. Añade poco a poco el resto de la harina. Dependiendo del tipo de harina puede que no necesites echar toda o puede que tengas que añadir un poco más. con la práctica aprenderás cuál es la consitstencia justa.
3. Amasa unos 10 minutos a mano y haz una bola. Envuélvela con papel film transparente y déjala reposar en el frigorífico al menos una hora.
4. Para pasar la masa por la máquina de hacer pasta, coge pequeñas porciones y dales forma de bola. Aplástala varias veces con un rodillo y si se pega espolvorea la masa por ambos lados con un poco de harina.
5. Pon el rodillo de la máquina para pasta en la abertura más grande (el número de esta abertura varía según la marca de la máquina, puede corresponder al número más pequeño o al más grande).
6. Pasa la masa para comenzar a estirarla. Si al principio se rompe o se pega, necesitará algo más de harina. Dóblala sobre sí misma y vuélvela a pasar hasta que quede más lisa. Cada vez que pases la masa por las diferentes aberturas, si la notas un poco húmeda, añade un poco de harina por ambos lados y extiénde la harina con la mano por toda la superficie.
7. Para estos tagliatelle he pasado la masa hasta la penúltima apertura.
8. Por último, cuando hayas estirado la pasta hasta conseguir el grosor deseado, deberás pasar las láminas por el accesorio de la máquina para cortar.
9. Una vez cortada la pasta la debes colgar y dejar secar durante unas horas. Yo para he esto utilizo un colgador de ropa plegable que tengo dentro de casa o ato una cuerda fina de punta a punta de una habitación y cuelgo la pasta en ella.

Tallarines con salsa de perejil

Hoy toca una receta de pasta muy sencilla, tallarines con salsa de perejil. A mi personalmente cuanto más sencilla sea la salsa, más me gusta la pasta, así que esta receta no podía faltar en mi recetario. Si buscas una receta para preparar cuando vuelvas a casa cansada o cansado, esta es una buena opción.

Ingredientes:

• 400 g. de tallarines
• 60 g. de perejil
• 1 o 2 dientes de ajo
• 8 cucharadas de aceite de oliva
• pimienta negra recién molida
• sal

Preparación:

1. Pica el perejil y el ajo finamente. Échalos en un recipiente y añade el aceite y un poco de sal. Mezcla bien y reserva. Si te gusta menos espeso puedes añadir un poco más de aceite.
2. Cuece la pasta en abundante agua salada. Escúrrela y añade la salsa de perejil por encima. Mezcla, sirve y echa un poco de pimienta negra y queso parmesano en cada plato.
3. Si te sobra salsa la puedes guardar varios días en el frigorífico.

Fuente: Blog de Esbieta.

espaguetis con almejas

Con el buen tiempo a mi me apetecen platos de pasta como este, es decir, un plato sencillo de preparar, pero con un sabor excepcional. La receta la aprendía hace tiempo en Italia y siempre que la preparo es todo un éxito. Acompañado de un vaso de vino blanco bien frío ni os cuento...

Ingredientes:
300 g. de espaguetis
2 ajos
1 o 2 cayenas
3 cucharadas de perejil
almejas o chirlas
pimienta negra
aceite de oliva
sal

Preparación:
Unas horas antes de preparar la receta, pasa las almejas por agua del grifo y después déjalas en remojo en agua fría con sal. Pasadas unas horas, escúrrelas y pásalas de nuevo por el agua del grifo para asegurarte de que están todas bien limpias. Si hubiera alguna rota, tírala.

Echa un buen chorrón de aceite en una sartén amplia. Añade los ajos finamente picados, la cayena picada y la mitad del perejil y cocina a fuego medio durante un minuto. Añade las almejas, pon la tapa y cocina a fuego medio hasta que todas se hayan abierto. Si queda alguna cerrada, quítala y tírala. Cuando se hayan abierto todas, sácalas y resérvalas en un bol. La cantidad de almejas no la he puesto porque siempre hago esta receta a ojo. Me guío por el tamaño de la sartén donde las voy a cocinar, es decir, que pongo una cantidad de almejas suficiente como par ocupar toda la superficie de la sartén. Pela 2/3 de las almejas y deja el resto con su cáscara.

Mientras, cocina la pasta. Para ello pon a hervir agua con sal en una olla. Cuándo empiece a hervir añade la pasta. Cuando quede poco para que terminen de cocerse los espaguetis, escúrrelos y pásalos a la sartén donde has cocinado las almejas. Remueve un poco para que se sigan cocinando y al final añade el resto del perejil, la pimienta recién molida, las almejas y un chorrón de aceite de oliva.

espaguetis a la matriciana

Los espaguetis a la matriciana son un plato de pasta sencillo y fácil de preparar. Si como a mi os gusta mucho la pasta, pero no queréis comer siempre pasta del mismo modo, esta receta os gustará. Lleva muy pocos ingredientes y como se prepara rápidamente, estoy segura de que os sacará de más de un apuro. Espero que os guste.

Ingredientes:
400 g. de espaguetis
1/2 vaso de vino blanco
350 g. de tomates pelados
80 g. de parmesano
200 g. de panceta
1 cayena
pimienta negra
aceite de oliva
sal

Preparación:
Pon a hervir el agua y mientras, echa un poco de aceite en una sartén y sofríe la panceta troceada. Echa la cayena.

Cuando la panceta esté transparente, añade el vino blanco y cuando se evapore reservar en un plato.

En la misma sartén echa los tomates pelados y cocina unos 10 minutos. Aplasta ligeramente con un tenedor para que el tomate que en trozos pequeños.

Echa sal en el agua hirviendo y cuece los espaguetis.

Cuando el tomate esté hecho, echa la panceta y la mitad del queso rallado.

Mezcla la salsa con la pasta y servir en cada plato con un chorrón de aceite de oliva, pimienta negra recién molida y queso rallado.

espaguetis a la putanesca

Otra receta clásica italiana que se prepara sobre todo en el sur, concretamente en las regiones del Lazio y la Campania. Los ingredientes que lleva la salsa no son muy utilizados por estos lares, al menos en caliente, y a más de uno le sorprenderán, pero lo cierto es que esta receta está muy rica. Las olivas negras y las alcaparras en una salsa está increíbles. Sin duda una receta muy mediterránea que no deja a nadie indiferente.


Ingredientes:
200 g. de espaguetis
3 cucharadas de aceite de oliva
1 ajo aplastado
1 cayena troceada
4 anchoas en aceite troceadas
1/2 cucharada de alcaparras
50 g. de olivas negras sin hueso
200 g. de salsa de tomate
1 cucharada de perejil

Preparación:
Sofríe el ajo aplastado junto con la cayena y las anchoas.

Añade las olivas troceadas y las alcaparras. Remueve un poco y añade la salsa de tomate y el perejil.

Cuece los espaguetis, escúrrelos y únelos a la salsa.

Espaguetis con berenjena

Aquí os traigo otra de mis recetas de pasta, espaguetis con berenjena. Más sencilla imposible. Como ya os he comentado alguna vez, me gusta mucho este tipo de pasta, sin salsas y con muy pocos ingredientes. Se prepara en muy pocos minutos y está muy rica.

Ingredientes (para 2 personas):

• 200 g. de espaguetis
• 1 berenjena frita
• ajos
• albahaca
• perejil
• aceite de oliva
• pimienta negra
• sal
• queso de oveja

Preparación:

1. Corta la berenjena en rodajas muy finas. Si quieres puedes quitarle la piel. Echa sal por ambos lados y deja reposar una media hora para que suelte el agua y se suavice su sabor. Después, quita el exceso de agua de las berenjenas y sofríelas en abundante aceite de oliva. Reserva.
2. En la misma sartén sofríe los ajos cortados en láminas hasta que estén ligeramente dorados. Corta las berenjenas en trozos pequeños y échalos a la sartén. Mezcla bien.
3. Cuece los espaguetis en abundante agua salada y cuando esté cocida escúrrelos pero dejando algo de agua. Que no se queden muy secos.
4. Echa los ajos y la berenjena en los espaguetis y mezcla bien. Salpimienta al gusto y espolvorea con albahaca y perejil picado.
5. En cada plato puedes echar un chorrón de aceite de oliva virgen extra y un poco de queso de oveja. Yo suelo usar Parmesano o el queso navarro Ronkari.

Macarrones rayados a la rabiata

Macarrones a la rabiata, un clásico italiano. Se prepara en pocos minutos y lleva muy pocos ingredientes. Como casi todas las recetas italianas de pasta, esta receta es muy sencilla de preparar y está muy rica. Una receta perfecta para cualquier época del año y en especial para esos días en los que no tenemos mucho tiempo para cocinar.

Ingredientes:

• 400 g. de macarrones rayados
• 4 cucharadas de perejil fresco picado
• 350 g. de tomate natural entero y pelado
• 4 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
• 2 ajos
• 2 cayenas
• 100 g. de parmesano
• pimienta negra
• sal
  

Preparación:

1. Comienza poniendo agua con sal a hervir en una olla.
2. Mientras se calienta el agua, sofríe en una sartén los ajos finamente picados y la cayena. 
3. Cuando el ajo comience a dorarse ligeramente, añade tomate entero natural pelado y con un tenedor aplasta un poco cada tomate hasta que queden en trozos. Para esta receta es mejor que el tomate no esté demasiado líquido.
4. Cocina a fuego lento unos minutos y salpimienta al gusto. 
5. Al final, añade la mitad del perejil y mezcla bien. 
6. Cuando la pasta esté cocida, escúrrela bien y añádela a la salsa. Mezcla todo bien y sirve inmediatemente. 
7. En cada plato echa un poco del perejil sobrante y un poco de parmesano recién rallado. 

pasta all'aglio, olio e peperoncino

¡Me encanta el nombre de esta receta en italiano! suena tan bien... y al fin y al cabo no es más que pasta con ajo, aceite de oliva y guindilla. Eso sí, la receta está muy buena. Simple, rápida de preparar y barata. Este tipo de receta se hace mucho en Italia y lo cierto es que a mi al principio me parecía extraña por lo simple que era, pero cuando un amigo italiano me la preparó un día en su casa, me convenció. Cuando llego tarde a casa y no tengo nada con fundamento en el frigorífico, la preparo. ¡Me ha sacado de más de un apuro!

Ingredientes (para 2 personas):
200 g. de espaguetis por persona
ajos fileteados
2 cayenas
aceite de oliva
albahaca fresca

Preparación:
Echa en una sartén un buen chorrón de aceite de oliva y sofríe el ajo. cuando adquiera un color ligeramente dorado, aparta del fuego y añada la cayena troceada.

Pon a cocer la pasta en abundante agua salada. Escurre bien la pasta y añádela a la sartén de los ajos. Mezcla bien y sirve. Espolvorea cada plato con un poco de albahaca fresca picada.

macarrones gratinados

Hacía una eternidad que no comía pasta al horno. Hace años probé varias recetas hechas por amigos italianos que como podréis imaginar estaban riquísimas, pero cuando me ponía a hacer yo sola en mi casa alguna receta de pasta gratinada, no me quedaba igual. Por suerte, el otro día me dio por ojear un libro de recetas italianas que tengo desde hace unos cuantos años y encontré esta receta. Me ha encantado. La primera cucharada me ha traído a la memoria muchos recuerdos, así que sin duda puedo decir que ahora yo también sé hacer una buena pasta al horno. Espero que os guste...

Ingredientes para 5 personas:
500 g. de macarrones rallados
500 g. de salsa de tomate
200 g. de carne picada
1/2 l. de bechamel
50 g. de mantequilla
queso parmesano

Preparación:
Cuece la pasta en abundante agua hirviendo y salada. No cuezas demasiado la pasta porque con la cocción en el horno se terminará de hacer.

Mientras, sofríe la carne picada y añade la salsa de tomate. Salpimienta al gusto.

Mezcla la pasta y el tomate y échalo en la bandeja que meterás después al horno. Antes de echar la pasta no olvides untar un poco el fondo de la bandeja con mantequilla.

Prepara la bechamel y echa la mitad sobre la pasta con tomate. Remueve ligeramente para que se mezclen todos los ingredientes y echa por encima la bechamel restante. Echa por encima algunos trocitos de mantequilla. A mi me gusta echar la mantequilla encima de los macarrones que no ha cubierto la bechamel.

Espolvorea con queso parmesano y gratina unos minutos hasta que la parte superior se dore ligeramente. No conviene tener la bandeja mucho tiempo en el horno porque si no algunos macarrones se secarán demasiado.

Sirve caliente y echa un poco más de queso parmesano en cada plato.

macarrones con calabacín y requesón

El otro día usé requesón para hacer unos raviolis y como me sobró un poco, decidí utilizarlo en un plato de pasta sencillo, sano y muy rico que en casa nos gusta mucho. Hacía bastante tiempo que no comía un plato de pasta con requesón, pero creo que no tardaré mucho en hacer otra receta de este tipo. Y es que la combinación pasta y requesón es un gran acierto. Este plato se prepara muy rápido y, repito, está delicioso. Si no habéis comido nunca requesón de esta manera, os animo a que lo hagáis y si sí lo habéis comido, os invito a compartir vuestras opiniones conmigo. Bueno, y ahora a lo que nos interesa... la receta.

Ingredientes para 4 personas:
380 g. de macarrones rayados
300 g. de calabacines
150 g. de requesón
1/2 cebolla blanca
20 g. de parmesano
aceite de oliva
pimienta negra
sal

Preparación:
Pon a calentar agua con sal.

Corta en juliana la cebolla y sofríela en una sartén con un poco de aceite de oliva. Cuando esté transparente añade el calabacín cortado en dados pequeños y salpimenta la gusto. Cuando esté hecho, aparta del fuego.

Cuando el agua empieza a hervir echa los macarrones y cuécelos. Mi consejo es que no cuezas demasiado la pasta. Escurre los macarrones y échalos sobre los calabacines y la cebolla. Remueve bien y añade el requesón. Mezcla con cuidado. En cada plato de pasta echa un chorrón de aceite de oliva y queso parmesano.

Raviolis rellenos de requesón y espinaca

¡Y ahora una de pasta! Hacía tiempo que no colgaba en el blog una receta italiana y aquí tenéis una que tiene un poco de trabajillo, pero que está molto, molto buona. Lo cierto es que yo disfruto haciendo pasta fresca en casa y lo de los raviolis me parece una pasada. Puedo pasarme la mañana entera sumergida en harina y no me doy ni cuenta. Espero que os guste la receta de hoy y que os animéis a hacerla. Os aseguro que es meterse el primer ravioli en la boca y teletransportarse de un salto al país vecino.

En este caso el relleno lleva requesón, pero los puedes rellenar de lo que más te guste. Yo llevo tiempo buscando recetas donde se use requesón, porque por estos lares se usa muy poco en cocina y creo que tienen un montón de posibilidades. Incluso sólo con un poco de miel me chifla. Por suerte, cada vez es más fácil encontrarlo en los supermercados, pero durante muchos años ha sido el gran olvidado.

Bueno... y ahora a la receta.

Ingredientes para la pasta:

• 200 g. de harina de trigo normal
• 2 huevos
• 1 pellizco de sal

Ingredientes para el relleno:

• 4 chalotas
• 1 yema
• 200 g. de requesón
• 2 cucharadas de espinacas cocidas

Ingredientes para la salsa:

• 1 cebolla grande
• 1 rama de apio
• 1 lata de tomate natural

Preparación:

Lo primero es hacer las láminas de pasta. Para ello mezcla en un bol todos los ingredientes y amasa con las manos hasta obtener una masa homogénea y compacta. Envuélvela con papel transparente y métela en el frigorífico durante una hora. Por cierto, las cantidades aquí indicadas son para dos personas. Mi máquina para hacer pasta tiene 6 números que corresponden al grosor que da a la pasta. Para los raviolis paso la masa hasta el penúltimo punto, es decir, hasta el número dos. De todas formas, puede que no todas las marcas sean iguales. La mía es de la marca Imperia y lo que te recomiendo es que pruebes diferentes grosores hasta obtener el que más te guste para este tipo de recetas. Una vez echas todas las láminas de pasta, déjalas sobre un paño de algodón para que se vayan secando un poco.

Lo siguiente es preparar la salsa de tomate y el relleno. En una sartén sofríe la cebolla finamente picada y dos trozos grandes de apio. Cuando la cebolla esté dorada, echa el tomate y un poco de sal. Cocina a fuego bajo y mientras prepara el relleno.

Para ello tienes que sofreír las chalotas finamente picadas. Cuando estén caramelizadas, échalas en un bol y añade el requesón y las espinacas cocidas. Mezcla bien y al final añade una yema de huevo. Mezcla todo bien y reserva.

Con la ayuda de un cortapastas como el de la foto, corta pequeños círculos. Yo utilizo un cortapastas de 6 cm de diámetro porque me parece un tamaño perfecto para poder formar después los raviolis. Con una cucharilla coloca pequeñas porciones del relleno sobre la mitad de los círculos.



Pasa clara de huevo por el borde de la pasta (aprovecha la que te ha quedado al separar la yema para el relleno) y coloca otro círculo encima. Intenta que te coincidan las formas redondeadas de ambos círculos. Colócalos sobre una bandeja sobre papel de hornear. Como ves en las fotos, otra opción es plegar sobre si mismo cada círculo como si fuera una empanadilla y si lo prefieres, puedes unir los extremos. Yo pongo un poco de clara de huevo en uno de los extremos y después los uno presionando bien para estar segura de que no se va a abrir. La verdad es que quedan súper bonitos, pero eso sí, tienen más trabajo.



Los raviolis ya están listos para ser cocidos, pero a mi me gusta secarlos un poco antes de echarlos al agua hirviendo. Por ello, lo que hago es calentar el horno, meter la bandeja de los raviolis rellenos y apagarlo. Los dejo ahí varias horas, controlando al principio para que no se sequen demasiado. Esto lo dejo a tu elección.

Si no haces esto, los cueces en abunadante agua salda durante un par de minutos y si los haces, durante unos 10 minutos.

Aparta el apio del tomate y lo trituras. Echa la salsa por encima de los raviolis, echa un chorrón de aceite de oliva y queso parmesano.

Buon appetito!

crepes de tagliolini y setas

Otra comida con crepes que ha resultado todo un éxito. Cuando vi en mi libro de crepes que éstos estaban rellenos de pasta, me picó la curiosidad. En casa tengo la máquina para hacer pasta, así que me puse enseguida a hacer "tagliolini", que son una especie de spaghetti pero mucho más finos. La verdad es que no sé como quedará esta receta rellena con unos spaghetti al huevo comprados, porque como digo siempre donde esté la pasta fresca casera...De todas formas, no quiero desanimaros, si no podéis hacerlos en casa pues probad con los comprados y contadme qué tal os han salido.

Ingredientes:
Para las crepes:
100 g. de harina normal
2 ml de leche
1 huevo
1 pellizco de sal

Para el relleno:
180 g. de tagliolini al huevo
nata para cocinar
40 g. de mantequilla
10 g. de setas secas
100 ml de nata para cocinar
pimienta negra
sal

Para la cobertura:
100 ml de nata para cocinar
queso parmesano
mantequilla

Preparación:
Comienza preparando las crepes. Para ello tan sólo tienes que mezclar todos los ingredientes hasta que no queden grumos. Echa un poco de mantequilla en una sartén pequeña antiadherente y echa un poco de la preparación. Dale vueltas a la sartén para que se reparta bien. Cuando esté ligeramente dorado, dale la vuelta. Recuerda que las crepes deben quedar lo más fino posible. Coloca las crepes en un plato según los vayas haciendo y reserva. Los puedes hacer incluso unas horas antes.

Ahora prepara el relleno. Deja las setas secas en un poco de agua templada durante unos 20 minutos. Escúrrelas y córtalas en trozos pequeños. Después, sofríelas en una sartén con un poco de mantequilla. Salpimienta al gusto.

Cuece los "tagliolini" en abundante agua salada. Escúrrelos y échalos en la sartén donde están las setas. Mezcla y añade un poco de nata líquida, la justa para que la pasta no quede seca.

Unta de mantequilla la bandeja donde colocarás las crepes y coloca la primera crepe. Echa por encima un poco de la pasta que has mezclado antes con las setas y pliega la crepe por la mitad. Haz lo mismo con las demás crepes. Yo he utilizado bandejas en forma redondeada para colocar dos crepes en cada una como podéis ver la foto.

Echa un poco de nata por encima de las crepes y espolvorea con parmesano rallado. Hornea en horno precalentado a 180 ºC durante unos 20 minutos y sirve caliente.

Nota: puedes sustituir las setas por unos champiñones (echa la cantidad que consideres oportuna). El sabor no será el mismo, pero también estará muy rica.

fideuá de lentejas

Esta receta tan sencilla pero a la vez tan rica, me la enseñó un compañero de piso de la universidad. No he conocido a nadie que la haga, así que probablemente se la inventó. Yo la llamo "fideua de pobres" por los fideos y por los pocos ingredientes que lleva. Si conocéis alguna receta que se le parezca, dejadme un comentario, yo encantada. Algún día haré un fideuá con fundamento, de los de verdad, pero con esto de la crisis, por el momento es el único fideuá que me puedo permitir, ja, ja.

La receta es muy fácil y no sé porqué, pero a mi me encanta. En casa me miran extrañados cuando me ven comer esto, no entienden que me guste tanto, pero que le vamos a hacer. Algunos disfrutan con un bocadillo de nocilla y pepinillos y yo con estos fideos.

Ingredientes:
fideos
1 ajo
caldo de lentejas
aceite de oliva

Preparación:
Echa un chorrón de aceite en una sartén y dora un ajo machacado. Quita el ajo cuando esté dorado y echa los fideos (la cantidad justa para ocupar todo el espacio de la base de la sartén). Cuando se doren un poco, cúbrelos con el caldo de las lentejas y cocina a fuego mínimo hasta que el caldo desaparezca. Fácil ¿verdad? Eso sí, es importante que el caldo tenga buen sabor. No utilices un caldo que sepa prácticamente solo a agua porque no será lo mismo.

Lasaña

Hacía tiempo que no hacía lasaña en casa. La verdad es que tiene un poco de trabajo, pero está tan buena que merece la pena. Yo hago las láminas de lasaña en casa porque me gustan muchísimo más que las compradas. Una vez que pruebas una lasaña con láminas caseras, no te apetecerá comer las compradas. También utilizo salsa de tomate casera y preparo la besamel en casa. El resultado es infinitamente mejor.

Ingredientes:

• 1/2 cebolla grande
• 1 zanahoria
• 2 cucharadas de perejil
• 100 g. de panceta
• 800 g de picadillo (mitad cerdo, mitad ternera)
• 1/2 vaso de vino blanco
• 750 ml de tomate
• 1 l. de leche
• 70 g. de harina
• 70 g. de mantequilla
• queso parmesano recién rallado
• sal
• pimienta negra
• nuez moscada
• aceite de oliva virgen extra

Preparación:

1. Para preparar el ragú, fríe en un poco de aceite de oliva virgen extra la cebolla y la zanahoria finamente picadas. Añade el perejil y la panceta.
2. Después, añade la carne picada y salpimienta al gusto. Añade el vino y después la salsa de tomate. Cuece a fuego lento y tapado durante 1 hora y 1/2 o 2 horas.
3. Mientras, prepara la besamel. Para ello echa la mantequilla en una perola y cuando se derrita echa la harina. Mezcla bien y añade la leche poco a poco. Echa sal y la nuez moscada recién rallada. Cocina a fuego medio durante unos minutos.
4. Unta el fondo de una bandeja con un poco del ragú.
5. Coloca la primera capa de lasaña y echa un poco de ragú y un poco de besamel.
6. Repite la operación hasta llegar a la última capa de lasaña. Al final echa un poco de ragú mezclado con un poco de besamel y espolvorea con queso parmesano recién rallado.
7. Mete la bandeja en el horno previamente calentado y gratina hasta que el queso se tueste un poco.
8. Nota: Como ya he comentado más arriba, las láminas de lasaña las he hecho con la máquina de hacer pasta. La verdad es que merece la pena hacerlas así porque el resultado final es espectacular. Yo las he preparado el día anterior. Para esta receta he usado 2 huevos y 200 gramos de harina floja (9% de proteínas) y he hecho unas 5 capas.

espirales con brócoli

Otra receta de pasta sencilla y muy nutritiva. Es una de las recetas de pasta que más me gusta. La aprendí en Italia hace unos años y gracias a esta receta comencé a comer bróculi. De hecho, debo reconocer que hasta el momento es la única forma en que consumo esta verdura. ¿Alguna sugerencia? Yo encantada de probar recetas nuevas, je, je. Espero que os guste y os animéis a comer pasta de forma sencilla, elaborada con pocos ingredientes.

Ingredientes:
200 g. de espirales
4 ajos
1 bróculi pequeño
aceite de oliva virgen extra
pimienta negra
queso parmesano
sal

Preparación:
Trocea el bróculi y cuécelo en agua salada. cuando esté tierno, sácalo y escúrrelo bien.

Mientras, echa un buen chorrón de aceite de oliva en una sartén y sofríe los ajos cortados en láminas. Cuando estén ligeramente dorados, añade el bróculi y remueve de modo que éste se desmenuza bien. Echa sal y pimienta al gusto.

Cuece en abundante agua salada la pasta, escúrrela bien y échala en la sartén con el resto de los ingredientes. La pasta no debe estar muy blanda porque luego la tienes que cocinar un poco más en la sartén, así que respeta el tiempo indicado en el paquete. Mezcla bien durante un par de minutos y sirve en cada plato con un chorrón de aceite de oliva virgen extra y queso parmesano rallado.