Mi última receta, por el momento, que lleva calabaza. Si habéis leído mis entradas anteriores sabréis que me han regalado grandes cantidades de calabaza en las últimas semana. Pues bien, gracias al blog kanela y limón he aprendido a hacer estos maravillosos buñuelos de calabaza. En ese blog los llaman fritos de calabaza, pero al ver cómo se inflaban y subían al echarlos al aceite me han recordado a los clásicos buñuelos. Estoy encantada con esta receta y es que ¡están buenísimos! Son súper fáciles de hacer y se hacen enseguida. Sin duda, los repetiré.
Ingredientes:
250 g. de puré de calabaza
140 g. de harina de trigo
50 g. de licor de anís
90 g. de azúcar moreno
1 huevo
1/2 sobre de levadura en polvo
azúcar con canela para espolvorear
Preparación:
Para hacer el puré solo tienes que pelar, trocear y cocer la calabaza en agua con un poco de sal. Cuando esté cocida, escúrrela bien y aplástala con un tenedor.
Bate el huevo y mézclalo bien con el resto de los ingredientes. La masa resultante es bastante líquida, pero no te asustes, al echarla a cucharadas en el aceite caliente se formarán en seguida los buñuelos sin desparramarse por el aceite.