4 oct 2011

come, come

Esta vez no voy a realizar ninguna receta, sino lo que yo considero una merienda divertida. Con esta idea me presento al concurso de recetas divertidas organizado por Morenisa en su blog. Se trata de preparar con los más peques de la casa una merienda que sin duda les va a encantar. La receta consiste en preparar una magdalena un tanto especial. Mejor será que os la presente:


¡Es tan mona, que me da pena comérmela!

Pero, claro, esto no es todo. Lo que se me ha ocurrido es preparar un tablero donde nuestro "prota" se mueva a su antojo. Para ello necesitaremos lo siguiente: lacasitos y un folio con los dibujos que veis en la siguiente foto. Si necesitáis la plantilla, no tenéis más que dejarme un comentario con vuestro email y os la mandaré en el formato que deseéis.


Te vas haciendo una idea de lo que vamos a preparar ¿verdad?. Pues, sí, un comecocos de los de toda la vida, pero hecho con lacasitos para que nuestro verdadero "prota" se los vaya comiendo a la vez que se toma esta hermosa magdalena y un buen vaso de leche. Que no todas las meriendas van a ser bocadillos de chorizo, hombre. Además, tu hijo, sobrino o nieto, puede colorear las lineas por las que supuestamente nuestro come-lacasitos no podrá pasar:



De lo que si estoy segura es que tanto él o ella como tú vais a pasar un rato súper divertido preparando el tablero y "tuneando" la magdalena. Por cierto, para los dientes de la magdalena necesitaréis unos supositorios blancos (los encontraréis sin problema en cualquier tienda de chuches) o si lo preferís, podéis usar unos piñones. Para los ojos yo he usado una gominola en forma de tubo y la he cortado en dos rodajas finas. No sé cómo se llama esta chuchería, pero es muy común, así que no creo que os cueste conseguirla.


¡Y ya está! ahora sólo os queda ¡¡¡comer, comer y comer!!!


Os dejo una foto del juego visto desde arriba, que aunque no lo hemos terminado de colorear, sirve para que os hagáis una idea del resultado final. Espero que os guste mi idea y que la realicéis algún día. Os aseguro que vuestros peques os van a adorar, porque se lo van a pasar muy bien preparando todo. ¿Quién ha dicho que comer es un rollo? 

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