Hace tiempo que tenía pendiente esta receta de origen escocés. Los shortbread fingers son unas pastas de mantequilla deliciosas y muy fáciles de preparar. Llevan muy pocos ingredientes, apenas necesitan amasado y es imposible que salgan mal.
Se hacen con harina de trigo normal y con un poco de harina de maíz o de arroz. Esto es lo que me llamó la atención. No sabía como podrían quedar las pastas con estas harinas y desde luego os puedo asegurar que quedan perfectas. He hecho la receta tanto con harina de maíz como con harina de arroz y en ambos casos salen muy buena.
Ingredientes:
- 250 g. de mantequilla a temperatura ambiente.
- 125 g. de azúcar glas
- 1 pellizco de sal
- 50 g. de harina de maíz o harina de arroz
- 300 g. de harina de trigo normal
Preparación:
- Tamiza las harinas y reserva.
- En un bol aplasta bien la mantequilla y añade la sal y el azúcar. Sigue amasando con la cuchara hasta que el azúcar se haya integrado bien.
- Añade las harinas y remueve primero con la ayuda de la cuchara y después amasa con las manos hasta conseguir una masa lisa y homogénea. Haz una bola, aplástala ligeramente y cúbrela con papel film. Déjala reposar como mínimo una hora en el frigorífico.
- Pasado este tiempo, saca la masa del frigorífico, coloca la masa sobre un papel de hornear y aplástala ligeramente con el rodillo. Coloca otro papel de hornear encima y dobla ambos papeles hasta obtener un recuadro de unos 22 cm x 24 cm. De esta forma podrás aplastar la masa hasta obtener un grosor de 1 cm.
- Después quita el papel superior y con una espátula o un cuchillo corta la masa en forma de pequeños rectángulos. No tienes porque separarlos entre sí. Agujerea la superficie con un tenedor y hornea en horno precalentado a 150 ºC durante unos 45 minutos. El tiempo depende de cada horno, así que vigila el color de la masa. A mí personalmente me gusta que apenas se doren.
- Deja templar las galletas y con las manos corta por las líneas que has marcado antes con la espátula. Si lo prefieres puedes espolvorearlas con azúcar glas.