Ya he comentado varias veces lo mucho que me gusta la avena y que cuando veo una receta que lleva avena no puedo evitar hacerla. La de hoy, unas sencillas pastas que vi en el blog de Merengue y frambuesa. Ya son varias las pastas de avena que hago y no sabría decir cuál es mejor: las galletas de avena y chocolate toda una delicia, las galletas de avenas suecas una agradable sorpresa o las barritas de avena y pistachos una combinación perfecta. Espero que os gusten estas también...
Ingredientes:
- 100 g. de mantequilla
- 200 g. de azúcar moreno
- 125 g. de harina de repostería
- 125 g. de copos de avena
- 1 huevo
- 3 cucharaditas de canela
- 1 cucharada de extracto de vainilla
- 1 cucharada de miel
- 2 manzanas peladas y ralladas
- una pizca de sal
Preparación:
- Mezcla la mantequilla a temperatura ambiente con el azúcar.
- Añade el huevo, el extracto de vainilla y la miel y continúa mezclando.
- Agrega la harina, la avena, la canela, las manzanas ralladas y la sal. Mezcla para bien todos los ingredientes.
- Coge pequeñas porciones de masa, dales forma de bolas, colócalas sobre el papel de hornear dejando espacio para que la masa se extienda y aplánalas ligeramente. Como la masa es muy blanda, yo lo que hago es colocar papel de hornear encima de la bola que quiero aplanar y la aplano con los dedos girándolos en forma circular. Después quito con cuidado ese papel.
- Precalienta el horno a 190 ºC. Hornea durante unos 20 minutos hasta que tengan un ligero tono dorado.
- Sácalas del horno y colócalas sobre una rejilla hasta que se enfríen.