Si una verdura se come en casa de mis padres por Navidad esa es el cardo. En su versión cocida esta verdura es muy suave y tierna y en su versión para ensalada es muy crujiente. Para que el cardo sirva para ensalada se cubre con sacos la planta. De esta forma queda más blanca. Si en cambio dejas la planta expuesta a la luz se vuelve más verde y se usa para cocinar. No os voy a engañar, lo que más trabajo tiene es limpiar el cardo, porque hay que quitar hoja por hoja todos sus hilos. A mi se me da fatal, la que es una verdadera artista es mi madre que lo hace a toda velocidad y sin que se le rompan los hilos. ¿Qué le vamos a hacer?
Ingredientes:
1 cardo para cocer
panceta o jamón serrano
ajos
1 cucharada de harina
aceite de oliva
sal
Preparación:
Quita los hilos de las hojas del cardo. Trocea cada hoja en trozos de unos 4 cm y échalos en una perola con agua. Cuando empiece a hervir, escurre el cardo y pásalo a la olla a presión. Cubre con agua caliente y echa un poco de sal. Cierra y cuece durante unos 15 minutos.
Una vez echa la verdura, escúrrela y reserva el caldo. En una sartén sofríe unos ajos fileteados y un poco de panceta o jamón troceado. Procura que no se hagan demasiado para que el ajo no se queme o el jamón se sale. Añade la harina y mezcla bien. Echa un poco del caldo de cocción hasta conseguir una salsa ligeramente espesa y échala al cardo. Calienta todo unos minutos antes de servir.