Hoy os traigo una receta de bizcocho pasiego y supongo que os podréis imaginar lo rico que está. Lo vi en el blog Asopaipas y me encantó. El bizcocho lleva muy pocos ingredientes y huele y sabe a repostería tradicional. De miga compacta, pero increíblemente deliciosa. Este bizcocho es de la región cántabra y según cuentan en este blog lo consumían antiguamente los campesinos. Después las monjas se hicieron con la receta y hoy en día se hace en muchos conventos. De verdad, está increíble. Si alguna vez tienes muchas claras de huevo y no sabes qué hacer con ellas, aprovéchalas para este bizcocho. Con un buen tazón de leche o de chocolate caliente está para subirse por la nubes.
Ingredientes:
- 250 g. de harina
- 250 g. de azúcar glas
- 125 g. de mantequilla
- 6 claras de huevo
- azúcar glas para espolvorear
Preparación:
- Bate la mantequilla con el azúcar glas hasta que haga espuma.
- Después, añade poco a poco la harina, sin dejar de batir para que no se hagan grumos.
- En otro recipiente bate las claras a punto de nieve con un pellizco de sal y échala sobre la masa. Mezcla despacio con movimientos envolventes.
- Unta un molde con mantequilla y echa en él la masa. Procura que ocupe sólo la mitad, porque suele subir bastante. Precalientas el horno a 160 ºC y hornea hasta que veas que al clavar la punta de un cuchillo sale limpio, unos 40 minutos más o menos.
- Deja enfriar y espolvorea con azúcar glas.